Los arpegios en la guitarra: Introducción

Arpegiar (término nacido de la técnica del arpa) es tocar sucesivamente las notas de un acorde. En la guitarra, cuando hablamos de arpegios hay que distinguir entre:

  • Arpegios en posición fija: Consiste en colocar un acorde en el mástil y tocar con la mano derecha las cuerdas de forma independiente. Es el recurso por excelencia de la guitarra clásica, pero también se emplea frecuentemente para acompañar canciones de pop, country o folk, por ejemplo.

  • Arpegios extendidos: Consiste en tocar de forma independiente las notas que forman parte de un acorde, sin necesidad de colocarlo sobre el mástil.

Este último es el recurso que voy a tratar en esta ocasión y su función principal es la de improvisar sobre cambios de acordes, especialmente en estilos como el jazz donde la cantidad de acordes empleados en un tema suele ser muy elevada.

¿POR QUÉ ES TAN IMPORTANTE QUE ESTUDIES LOS ARPEGIOS EN LA GUITARRA?

  • Definen con gran claridad la armonía y te aseguran tocar "inside" (dentro de la tonalidad).

  • Son un gran recurso para la improvisación y, al igual que las escalas, van a enriquecer tu vocabulario.

  • Te van a ayudar a visualizar mejor el mástil y a ser más melódico en tus solos.

  • Conseguirás mayor elasticidad en los dedos de la mano izquierda.

¿CÓMO ESTUDIAR LOS ARPEGIOS EXTENDIDOS EN LA GUITARRA?

  • Estudiarlos muy lentamente y aumentar progresivamente la velocidad.

  • Utilizar distintas digitaciones. Es aconsejable tocarlos a partir de cualquier dedo y cuerda.

  • Buscar la misma fluidez ascendiendo que descendiendo.

  • Tocarlos con todo tipo de variaciones y utilizando distintos recursos: diferentes dinámicas y rítmicas, legato y stacatto, aplicando acentos, usar ligados, etc.

  • Tener presente siempre las notas que se están tocando y cantarlas al menos interiormente.